Nuestras vidas

 PARO ESTUDIANTIL / PARO DE PASAJEROS

Paro de pasajeros: se cumplía muy bien a pesar de las dificultades. Algunos veníamos del norte de la ciudad, nos quedaba muy lejos, pero íbamos caminando en grupos. En trayecto de las líneas de colectivos esperábamos algunos, subíamos al cole y convocábamos a los estudiantes que viajaban a que se adhirieran, mientras otros pegaban los cartelitos en el exterior del cole.
También los empresarios estuvieron de paro en varias oportunidades porque presionaban por aumentos de boleto. En todo  contábamos con la solidaridad de la gente.

LA LUCHA POR EL MEDIO BOLETO

A fines del año 1971, se rumoreaba sobre conseguir el ½ boleto estudiantil para los estudiantes secundarios. Estaba el proyecto, por parte de la Municipalidad, de darlo a los primarios, pero nosotros decíamos: los más chicos van casi siempre a la escuela que les queda más cerca; en cambio, nosotros, en una gran mayoría nos tenemos que manejar en cole. Pero bueno, el año pasó y vinieron las vacaciones.
Sin embargo, 1972 empezó con todo: los empleados municipales anunciando un paro, los estudiantes universitarios cuestionando los cursos pre-ingreso, hubo  un atentado contra el intendente (Puccio); se sentían rumores de paro desde otros gremios y todo, como mar de fondo, llevaba a cuestionar la dictadura militar que se había instaurado en 1966 y que, si bien había tenido varios simbronazos (el Cordobazo, el Viborazo entre otros), no quería dejar el poder bajo ningún concepto.
Cuando comenzaron las clases nuevamente, el tema del medio boleto seguía rondando las conversaciones en los patios de las escuelas y a la salida de las mismas.
Creamos comisiones pro-centro e ibamos a las escuelas que todavía no estaban organizadas, conociendo, contactando chicos. La consigna Medio Boleto logró una pronta adhesión, 1972 aglutinó a todos en un año de mucha ebullición política. El peso del transporte en el presupuesto familiar era considerable, la mayoría de las escuelas tenía doble turno, o deporte, o educación física, y así muchos chicos se fueron incorporando a la actividad sin tener militancia, muchos de ellos se sumaron después a las agrupaciones.
En las primeras reuniones se discutió sobre la participación de las escuelas privadas. La posición mayoritaria fue para que apoyen y así se sumaron Inmaculada, Calvario, Verna, Juan XXIII. Las agrupaciones se reunían en forma reservada en la sala de la I L Peretz para tratar cuestiones de la organización que debía ser clandestina: confección de volantes, autodefensa, actos relámpagos, (petardos, molotov)
No nos eran ajenos, tampoco, los reclamos de las organizaciones vecinales, ni la situación de los presos políticos que iban llenando las cárceles del país.
Así, en medio de todo este clima y mediante la convocatoria que largaron los Centros de Estudiantes (clandestinos, porque no nos dejaban agrupar en forma legal) y las agrupaciones políticas secundarias empezamos a juntarnos para discutir y cómo podríamos lograr el medio boleto.
Algunos directores se mostraron interesados y comenzaron a propiciar instancias de negociación para tratar con las autoridades. En este marco, se logró una reunión con la Municipalidad a la que asistieron autoridades escolares, padres, cooperadores y alumnos de las escuelas Comercial, Industrial, Juana del Pino de Rivadavia, Normal, Inmaculada y Nacional. Por supuesto, el resultado fue cero: la municipalidad dijo que era imposible conseguirlo.
Mientras tanto, nos estábamos organizando y elegimos 2 representantes por escuela, con ellos se formó una Comisión que comenzó distintas tratativas (con la Municipalidad, la cámara de transportistas –CISTA-, algunos directivos de escuelas, etc.)
El 29 de Mayo de 1972 nos reunimos en el Sindicato de Artes Gráficas y allí se dispuso, por mandato de Asamblea, una marcha para el día siguiente, en la que fuimos de escuela en escuela explicándoles a nuestros compañeros secundarios el por qué de la misma y que no entraran y se sumaran a la marcha.
El martes 30 se realiza el paro por la mañana con gran éxito. La movilización sale de San Martín y L. de la Torre, dobla por Salta, pero cuando llega a la esquina de 4 de enero es violentamente dispersada. Hay una protesta generalizada por la represión
Por supuesto, la policía nos dispersó (como diría el Director del Industrial, Fernández Grand, “en un exceso de celo, que lamentamos”, pero la brecha estaba abierta: LOS SECUNDARIOS PELEARIAMOS POR EL MEDIO BOLETO ESCOLAR.
Asambleas en la Facultad de Derecho, gran marcha por calle San Martín reprimida con gases y cachiporras al llegar a Suipacha, nuevo paro, asamblea en Ingeniería Química, acto en San Jerónimo y Rosario (Lisandro de la Torre) dispersado violentamente por la policía. Los vecinos y los comerciantes del centro ayudan a cubrirnos y refugiarnos. Los sindicatos defienden a los estudiantes, ATSA y la Comisión Intersindical de Santa Fe apoyan el reclamo y se indignan por la represión a la que sometieron a jóvenes de 13 y 14 años.
A la semana siguiente fuimos más de 1000 secundarios reunidos en asamblea en el sindicato de la Sanidad. La Policía cierra la manzana, más de 100 detenidos a la Comisaría, los padres retiran a sus hijos, los abogados Ricardo Molinas y otros defensores de presos políticos actúan con rapidez.
Nada detiene el movimiento, la Lucha se generaliza y decidimos que los estudiantes no tomen colectivos hasta la implantación del medio boleto, pidiendo colaboración a la población para ello. Incluso los transportistas especulan con la situación porque también presionan para aumentar los precios.
El 29 de junio se produce lo que la lucha popular denominó como “Manzanazo”, cuando al intentar el Ejército tomar el barrio de Villa del Parque, epicentro de la lucha municipal, los pobladores interceptan un tren de carga convirtiéndolo en una barrera a los largo de todo el terraplén que separa al barrio de la avenida de circunvalación.(El tren, cargado de manzanas fue saqueado y las manzanas fueron utilizadas como elemento de defensa contra las tropas que atacaron con armas largas y como alimento distribuido en los ranchos). El municipio volvió a las negociaciones y se levantó el paro de ASOEM.
Pocos días después comenzaron las vacaciones de julio y el tema del medio boleto es nuevamente considerado a fines de mes, los estudiantes avanzan en tratativas con CISTA y se trata de protegerse de las represiones planteando continuar la agitación mediante actos relámpagos
El 31 de julio se realizó una reunión en la secretaría de Servicios Públicos donde su titular plantea a la Comisión la forma de implementar el medio boleto, considerando la situación del boleto en la Escuela Industrial que tiene doble turno. Se anuncia que será implantado el medio boleto para los estudiantes secundarios estatales de Santa Fe y Santo Tomé, pero también se dispone un aumento general del boleto, que genera reacción en todos los sectores asalariados.
Producto del desgaste y la negociación, la Municipalidad acepta conceder 5000 boletos estudiantiles para quienes vivieran a más de 15 cuadras, sin poner otras condiciones, incluyendo a las escuelas privadas en igual condición que la estatal, mediante la confección de un carnet por parte de CISTA y su entrega en las escuelas.
El Interventor municipal firma la Ordenanza Nº 6574 y a  fines de agosto el gobernador militar Sanchez Almeyra firma el decreto que pone en vigencia el medio boleto.

Memoria, Verdad y Justicia  por nuestros compañeros asesinados por la dictadura cívico-militar


Cuatro años después, en marzo de 1976 comenzó la dictadura más cruel de nuestra historia. Estos compañeros, que lucharon por la conquista del medio boleto en el año 1972 fueron asesinados por el terrorismo de Estado después de 1976.


Comercial “Domingo G Silva”

Ernesto Duarte
Gustavo Bruzzone
Liliana Nahs
María Dolores Vargas

La Salle
Carlos Tenutta


Escuela Industrial Superior
Néstor Cherry
Alberto Solé
Aldo Partida
Carlos Pepe
Silvina Urteaga
Susana Sanchez
Luis Verdú
Edgardo ferreyra
Angel Fiocchi

Verna
Cristina Mattioli

Pizarro
Santiago Werle

Escuela Inmaculada
Publio Molinas

Calvario
María Molinas

Escuela Nacional
Héctor Bertona
Daniel Suárez

Normal
Héctor Fluxá

Almirante Brown
Patricia Villar

1 comentario:

  1. Fui partícipe de cada reunión, manifestación y reclamo desde mi condición de alumna de la escuela Almirante Brown. Fue mi primera lucha activa por conquistar derechos, y nunca más abandoné esa actitud demandante. Muchos años después de aquel 1972, ya en mi condición de concejala de la ciudad de Santa Fe atendí (y di las respuestas posibles) a los estudiantes que reclamaban la ampliación del beneficio del boleto estudiantil. Las vueltas de la vida!!! Marta Fassino

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